miércoles, 1 de abril de 2009

Sexo y prostitución

La prostitución es una vía de entrada del crimen organizado. Siempre y en todas partes. A través de la prostitución se introducen grupos de explotación de mujeres, y a la vez o posteriormente, de tráfico de drogas.

Yo no estoy en contra de la prostitución, si ésta fuese ejercida libremente, legalizada y con garantías sanitarias. No tengo nada en contra de que entre dos personas exista una relación laboral libre, uno vende y el otro compra, sea lo que sea lo que se tenga para vender.
Porque para vivir, cada cual vende o alquila lo que quiere o puede. Unos venden sus habilidades o conocimientos, otros cultivan patatas, y otros no tienen (o no quieren) nada más que ofrecer que su cuerpo.

Otra cosa muy distinta es la prostitución ejercida sin querer. Mujeres obligadas a prostituirse por gente sin escrúpulos que las engañan. Extranjeras que son traídas al país por grupos organizados con falsas promesas de trabajo y al llegar aquí las obligan a mantener relaciones sexuales para lucrarse ellos. O a menor escala, pero igual yugo, los proxenetas. Eso es explotación y esclavitud.

En A Coruña este fin de semana pasado han desarticulado una red de esclavas sexuales.
Obligaban a las chicas a trabajar en un zulo hasta 20 horas seguidas, a veces sin comer siquiera, no les permitían ducharse entre servicios y tenían un único juego de sábanas al día. Les ponían multas de 20 euros si salían más de una hora al día al exterior, les obligaban a practicar sexo sin preservativo y tenían que permitir a los clientes drogarse en su presencia.

Una de las cosas que más me ha sorprendido de la noticia es la presencia de cuatro mujeres entre los seis detenidos.

No sé por qué no se legaliza la prostitución. Se acabarían muchos problemas. ¿Es por nuestros prejuicios judeocristianos? ¿Puritanismo hipócrita? ¿Pseudofeminismo?

5 comentarios:

PATSY SCOTT dijo...

Me sumo a la condena de las mafias, redes,gigolós y demás.
Yo he de admitir que tengo sentimientos encontrados al respecto.
Desde el punto de vista de los que creen que la prostitución (el oficio más antiguo del mundo, dicen, pero también lo es la guerra y eso no la justifica), en estos tiempos en que la libertad sexual está generalizada, a mí me parece que la prostitución empieza a perder un poco el sentido que tenía.
Yo no puedo evitar verlo como un acto de denigración hacia la mujer (y a las que no se cansan de repetir en televisión que lo hacen porque les gusta, les diría que entonces lo hagan gratis).
El que paga,se siente dueño de lo que compra y esto significa que hace lo que quiere con el "objeto" que ha comprado.
No me gusta escuchar cómo se le da un aire de normalidad "la prostitución es una profesión como cualquier otra" - (no, porque no se estudia para ejercerla; no, porque no puede elegir uno la empresa o el cliente, etc.etc.)siempre pienso en las mujeres que limpian escaleras o en las jovencitas que no encuentran trabajo y a quienes se les presenta como una opción más.
Dicho todo lo cual, si no es eliminable, que SE REGULE.
Creo que si fuera una actividad que pudiera fiscalizar hacienda, desaparecerían las mafias, los chulos impresentables e incluso se les quitarían las ganas a muchos y muchas que insisten en que se gana mucho dinero y se empeñan en presentar el mundo de la "alta prostitución" como el no va más del glamour.
Vaya rollo me he mandado!

Candela dijo...

Leí cuando escribiste. Sacaste un tema al que le di cien mil vueltas hace tres años. Aún no lo tengo claro por más argumentos que leo a favor de regularla y a favor de prohibirla. De hecho tu post y el comentario de Patsy, son un perfecto compendio de las razones más válidas hacia un lado o hacia el otro.

Sí creo que es hasta cierto punto equiparable a cualquier trabajo. Tampoco la que se arrodilla a fregar suelos lo hace seguramente por vocación ni elige a su pagador más de lo que la prostituta puede elegir al suyo.

Sin embargo en la prostitución hay un elemento de "intimidad" que vuelve invisible el sometimiento de la pagada al pagador, llegando -y lo sabemos- a veces a extremos de auténticas torturas y hasta de asesinatos, porque es en el sexo en donde más se demuestra "lo macho que soy y el poder que tengo sobre ti".

Me temo que por más que prohiban la prostitución, seguirá ejerciéndose. Eso sí, a la sombra, lo cual desde mi punto de vista no es más que un doble peligro para la mujer que la ejerza. Ambos, prostituta y cliente, serán furtivos, pero esa clandestinidad para ella supondrá un terrible riesgo vital (por no poder denunciar abusos, por no tener controles de salud, por ser proclive a chantajes so pena de verse en la cárcel...).

La palabra prohibición no me gusta. Prohibir el aborto por ejemplo sería lanzar a miles de mujeres a prácticas clandestinas que las podrían llevar a la muerte. Prohibir la prostitución, tres cuartos de lo mismo.

Prefiero hablar de regulación, porque -repito- la prostitución no se va a terminar por más libertad sexual que exista.

En un comentario no me gusta extenderme demasiado, pero el tema es interesante para debatir, aunque sé que hablar de regulación cuando el feminismo va por el camino de la prohibición, sé que roza lo políticamente incorrecto. Tanto me da, prefiero el debate.

maikix dijo...

Patsy, Candela, menudos comentarios! Esto da para una mesa redonda.
Es evidente que es un tema controvertido y difícil porque hay argumentos válidos a favor y en contra, y no es fácil posicionarse. Pero como decís, donde no hay regulación aparecen los abusos. También en mi trabajo a veces tengo que "prostituirme", cuántas veces no sufrimos vejaciones a cambio del sueldo que recibimos? Sin embargo, el que me paguen no quiere decir que puedan hacer conmigo lo que quieran, tengo mecanismos a los que puedo acudir para hacer valer mis derechos, porque mi trabajo es legal. En el caso de la prostitución, no veo porqué no sería igual: en realidad uno alquila un servicio, no lo adquiere de por vida.
Bueno, lo dicho, que da para un congreso.
Y no olvidemos que también existe la prostitución masculina.
Un beso para cada una.

Anónimo dijo...

Tema complejo. Lo cierto es que, en España, la prostitución NO es ilegal. Lo que es ilegal y está penado (justamente, por cierto) es el proxenetismo, es decir la explotación de terceros. Ahora bien: el movimiento por la "legalización de la prostitución" tiene defensores en sectores que piden cosas muy distintas.

Lo que piden las trabajadoras del sexo es algo justo: que el Estado les reconozca como trabajadoras con derechos. Es decir: poder cotizar, Seguridad Social, etc. Esto me parece absolutamente necesario, independientemente de las consideraciones éticas de cada cual. Muchas veces hay personas que por las circunstancias de la vida se ven en una situación X y es denigrante que tengan que vivir de forma sumergida y con cero derechos.

Ahora bien: muy distinta es la reivindicación de las personas (principalmente empresarios mafiosos y proxenetas sin escrúpulos) que abogan por la "legalización de la prostitución" cuando lo que realmente quieren es que se legalice el proxenetismo. Es decir: convertirse en empresarios del sexo explotando a terceros (bueno, casi siempre a terceras, para qué nos vamos a engañar). Y por aquí coincido contigo, sí que no: la prostitución organizada (es decir, la legalización del proxenetismo) no tiene NADA que ver con el movimiento por la protección de las trabajadoras del sexo y es algo contra lo que debemos luchar.

Además, mirando quiénes son los defensores de esta "legalización"... brrr... escalofríos me dan.

maikix dijo...

Tras este comentario, "Uni", casi que damos por concluída la mesa redonda! Estupendas reflexiones y verdades como puños. Estamos de acuerdo.
Saludos!

LinkWithin

Blog Widget by LinkWithin