domingo, 15 de marzo de 2009

Jade Goody (y II)

Jade Goody tiene 28 años y un cáncer terminal. Es famosa en el Reino Unido por su participación, desde que tenía poco más de 20 años, en distintas versiones del programa Gran hermano, y considerada la persona más mediática de su país. En el nuestro saltó a la fama al anunciar que quería vender su muerte en directo a una televisión.

Confieso que no me había interesado demasiado. No le presto atención a Grandes Hermanos, realities o programas parecidos, ni a sus personajillos derivados. Y en el debate sobre su decisión final, que si es ético, morboso, justo... tampoco quería entrar. Después ha resultado que la muerte no, pero sí su boda, su bautizo, sus despedidas, sus últimos días, su entierro... Todo está vendido.

Me llamó la atención que no se especificara de qué se moría, y ahí empecé a buscar. Una persona tan joven, en estado terminal...
Se muere a causa de un cáncer de cuello uterino diseminado, situación muy rara hoy en día en países avanzados.

El cáncer de cérvix (cuello del útero), está causado por el virus del papiloma humano (HPV). Es de los pocos cánceres en los que se conoce la causa, y las lesiones precancerosas que llevan a él. Es también uno de los cánceres en los que existe diagnóstico precoz (en los países desarrollados) mediante las revisiones ginecológicas periódicas con citología incluída. La citología es un excelente método para detectar lesiones muy precoces, y en estadios curables. Gracias a ella en los países desarrollados ha disminuído drásticamente la mortalidad por cáncer de cérvix.

El HPV es un virus con más de cien cepas diferentes, y sólo algunas se consideran de alto riesgo para desarrollar un cáncer. Mediante la citología se puede detectar la presencia de infección por dicho virus, y determinar la cepa.
Actualmente se está en disposición de una vacuna, que ha empezado a aplicarse hace muy poco tiempo (y que por cierto ha causado algunos problemas). El virus se transmite mediante las relaciones sexuales, así es que la vacuna tiene que ser administrada antes de tener relaciones sexuales. Por eso se vacuna a niñas púberes.

A los 16 años a Jade Goody ya le diagnosticaron una citología anormal. Mantiene que no había tenido relaciones, cuando no es posible. Posteriormente siguieron las citologías anormales, a las que no prestó atención.
En agosto de 2008 Jade acudió a la versión VIP del Gran hermano indio. A los pocos días de entrar en la casa, recibió en directo la llamada de su médico, que le comunicó que tenía cáncer, y que debía abandonar el reality de inmediato para recibir tratamiento. El cáncer ya estaba diseminado por otros órganos fuera del útero.

Y aquí es donde quiero relacionar el post anterior con éste. Jade Goody no ha sido víctima de su cáncer, sino de ella misma. A Jade Goody no se le diagnosticó demasiado tarde su cáncer. Tenía en sus manos la posibilidad de curarse y no lo hizo. No sirve de nada utilizar los métodos de detección precoz y no hacerles caso. Ni sirve de nada esconder la cabeza bajo el ala ante un diagnóstico adverso. Los ciudadanos tenemos derecho a una sanidad moderna, universal y eficaz, pero también tenemos la obligación de utilizarla bien y de prevenir.
En beneficio de todos.

2 comentarios:

PATSY SCOTT dijo...

Maica, me encanta la vuelta de tuerca que le has dado a este caso.
Ya podría hacer otro tanto la prensa y utilizar estos extraños casos de notoriedad dudosa para ejemplificar en lugar de limitarse a ahondar en detalles escabrosos.
Un beso.

maikix dijo...

Eso es lo que yo pensaba al escribir el post. No sólo la prensa, sino ella misma podría haber utilizado su protagonismo en beneficio de otros casos. El dinero que dejará a sus hijos no les va a devolver a su madre, y no sé si estarán muy orgullosos...

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