lunes, 16 de mayo de 2011

Campechano

(Fotografía de Yann Arthus Bertrand)


Yo no veo la vida en blanco y negro, ni siquiera en gamas de grises, sino en distintos tonos de azul y rosa.

Como sabéis, mi trabajo consiste en diagnosticar las enfermedades mediante el examen de los tejidos enfermos a través del microscopio. Para ello, el tejido debe ser cortado en láminas muy delgadas, de micras de grosor, lo que se hace con un microtomo.
Tan finos son los cortes que son transparentes, así que para poder distinguir las estructuras, hay que teñirlas.
Y la tinción de rutina por excelencia, usada desde los inicios de la especialidad, y que no ha sido mejorada por ninguna otra, es la Hematoxilina&Eosina, es decir, una combinación de hematoxilina y eosina.

La hematoxilina tiñe de azul oscuro o violeta las estructuras basófilas (ácidos que tienen afinidad por las bases), como los núcleos de las células, y la eosina en distintos tonos de rosa las acidófilas o eosinófilas (bases que tienen apetencia por los ácidos), como los citoplasmas celulares, o las fibras de colágeno.

La eosina es un colorante sintético derivado de las anilinas, y debe su nombre a la diosa Eos (el equivalente griego de la Aurora de los romanos), que era la doncella del alba quien, con sus sonrosados dedos, descorría cada mañana el negro manto de la noche y anunciaba la inminente llegada de su hermano Helios, el sol.
¡No me diréis que no es poético!

La hematoxilina en cambio, es un colorante natural obtenido del palo de tinte, un arbusto de cuya madera se obtiene por cocción un colorante rojo como la sangre. El palo de tinte es originario de Campeche, provincia de la península de Yucatán, en México. En el siglo XVIII Linneo denominó al colorante sangre de madera, en griego hemato (sangre)- xylon (madera), o Haematoxylum campechianum. Así que la hematoxilina es en realidad roja, pero en contacto con el agua vira a azul púrpura.

Yo conocía el origen de la hematoxilina y se lo cuento a los nuevos residentes que llegan cada año. Pero lo que no sabía es algo que no tiene nada que ver con la hematoxilina y sí con Campeche, y que me ha hecho gracia.
Resulta que Campeche, según dicen, es tierra de vida placentera, y los naturales de Campeche gozan de fama de cordialidad y trato afable. De ahí que a quien se comporta con llaneza y cordialidad, desdeñando formulismos y etiquetas, sin imponer distancias, se denominan en todos los países de habla hispana "campechanos". Como el mismísimo rey Juan Carlos, sin ir más lejos.

Y yo que creía que venía de campo...

6 comentarios:

PATSY SCOTT dijo...

Preciosa la historia de Eos - no sabía nada de nada sobre Campeche, dan ganas de irse a vivir allí.:)) Besos y tú sigue viendo la vie en rose!! (Sigue la cosa viento en popa?)

maikix dijo...

Jajajaja... la vie en rose, Patsy? Más bien yo diría "azul oscuro casi negro"! (Ya te contaré)

Hay un residente mejicano en mi departamento, con el que me llevo muy bien, y le conté lo del adjetivo "campechano". Él no sabía que también aquí lo utilizamos. Me contó que en general la gente de la costa (cualquier costa) mejicana es campechana.

ISA dijo...

Pues mira qu has despertado mi vena filologíca y he mirando en San Google:
1.- Campeche es una palabra maya compuesta de "kam", serpiente, "pech", garrapata, y la terminación "e", que indica lugar, por tanto Campeche significa "Lugar de serpientes y garrapatas".

Según otra versión, Campeche es la alteración de la palabra maya "kimpech", que significa "Garrapata brava, picadora" ("kim", caliente, bravo; y "pech", garrapata).

2.- En Castellano: (según la RAE)su etimologia es : De Campeche y el sufijo -ano (-ano se usa para la formación de gentilicios y crematónimos, tanto con nombres propios (de Bolivia, boliviano, por ejemplo) como comunes (de país, paisano) y las acepciones son:
- Propio de, relativo a, o natural de Campeche, México.

- De trato relajado, sencillo y cordial

- Que no muestra reparos ni retaceos en compartir sus bienes
Sinónimos: dadivoso, franco, generoso, liberal, magnánimo, magnífico

¡toma ya¡. Por cierto en Venezuela "campechana" es sinónimo de prostituta y también de hamaca.
En México es un pastel de hojaldre.
Toma ya¡¡

Jordi Miquel dijo...

Me ha hecho mucha gracia porque yo estuve en Campeche en un viaje precioso por Yucatán y Chiapas. Y este viaje siempre estará asociado a Campeche. El motivo es que tengo tendencia a inventar nombres, mezclarlos y en el caso de Campeche, siempre decía Campechano, era incapaz de recordar el nombre correcto. Y era motivo de risas de mis compañeros de viaje, hoy, 14 años más tarde, aún me lo recuerdan. Jordi

maikix dijo...

Hola Isa!
He estado fuera unos días. Me alegro de haberte estimulado a curiosear por ahí.
No parece muy concordante el origen del nombre de Campeche con su fama, no crees?
Besos.


Jordi, tampoc és tan greu, confondre Campeche amb Campechano, tot i que és evident que el segon és el gentilici.
Aquest és el viatge que em vas comentar que era (fins ara) el millor de la teva vida, oi?
Un petó.
P.D. Com va el ball?

Jorge Ramiro dijo...

Me gusta mucho la historia y la forma en que la adaptas y combinas con la medicina. Justamente yo estoy estudiando patología asi que entiendo varios de los conceptos que utilizaste. Deseo ir a fravega a ver si hay esos microscopios con gran resolución y sino comprare una tele para ver las imágenes

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